Me di cuenta de que tengo memoria en las yemas de los dedos, es decir, que si tengo que "decirlas", no sé la ubicación de las letras en el teclado, pero cuando escribo, casi ni lo miro. De hecho, si no miro y trato de "pensar" en la ubicación de las letras, tengo que parar a ver sí o sí, pero si me concentro en la "forma" de las palabras y me dejo llevar, escribo tan rápido como si estuviese mirando.
Debe ser un nuevo tipo de enfermedad de la memoria causada por el abuso mundial del teclado, o quizás existe desde la época de las secretarias y no lo sé.
Debería llamarse "síndrome yemesco" o "de la secretaria".


A las secretarias, ¿se les dice "secretarias" porque guardan "secretos"?