A mí tener mucho trabajo me deprime. Casi todos me salen con: "che, pero qué bueno que tengas tanto trabajo", y yo no, no quiero. Yo detesto trabajar, y mucho más, trabajar mucho.
Por otro lado, cuando trabajo no tengo tiempo para pensar; esto tiene su lado bueno: evita que me deprima, así que trabajo más para no deprimirme de que trabajo mucho, entonces, como trabajo mucho me deprimo.


(después de tanto tiempo acá debería haber escrito EL POST, pero como estoy con tanto trabajo no tengo tiempo para pensarlo, y no sigo porque me deprimo. Me voy a trabajar. Cuando pase esta espantosa racha laboral vuelvo. Antes de terminar de deprimirme, obvio.)